No sé vosotras, pero ahora mismo yo estoy más de pelis románticas o series sin mucha sustancia; creo que las emociones fuertes las tengo nada más salir al ascensor.
Me apetece más que nunca encontrarme bien y dedicar el tiempo que me queda a cuidar mi piel, mi salud y mi cabello. Creo que, en lugar de ir corriendo de un lado a otro, este nuevo ritmo invita a invertir en un masaje, un tratamiento de piel, o hacerme una mascarilla de media hora en casa.